El psicologo que electrocutaba perros

Martin Seligman es un muy renombrado psicólogo.

Planteó una famosa teoría que explica una dinámica muy chunga que puede llevarnos a la depresión.

Para demostrar su teoría, Seligman ideó un experimento con perros que se hizo muy famoso:

Diseñó un experimento donde colocaba a estos perros en una jaula con dos compartimentos. La idea era que uno de estos compartimentos daba una pequeña descarga eléctrica (tranqui, no les hacía daño grave, pero sí era incómoda). Lo interesante aquí es que los perros podían saltar al otro compartimento para evitar la descarga.

Ahora, viene la parte importante…

Seligman, en una fase previa, expuso a algunos de estos perros a descargas de las que no podían escapar. No importa lo que hicieran, las descargas llegaban igual… se cambiaran de lado o no.

Después de un tiempo, cuando estos perros fueron colocados en la jaula con dos compartimentos, en los que sí podían evitar la descarga: no hacían nada para evitarla, ni siquiera intentaban saltar al otro lado donde estarían seguros. Simplemente se quedaban quietos, como si hubieran aceptado que no había nada que pudieran hacer.

Esto es lo que Seligman llamó indefensión aprendida: una especie de resignación que surge cuando una persona (o en este caso, un perro) se convence de que no importa lo que haga, nada va a cambiar. Es como si dijeran: "¿Para qué intentarlo si nada va a funcionar?"

Y si te pones a pensar, es algo que nos puede pasar a todos en algún momento. Cuando las cosas no salen como queremos, una y otra vez, podemos empezar a creer que nada de lo que hagamos va a cambiar la situación, y entonces dejamos de intentarlo.

Es como si nos sentáramos en un rincón, aceptando que no podemos hacer nada, aunque en realidad sí que existen opciones que no hemos explorado.

Este experimento nos muestra cómo nuestras experiencias pasadas pueden influir en cómo respondemos a nuevas situaciones.

Pero la buena noticia es que, al igual que los perros que finalmente aprendieron a saltar, nosotros también podemos aprender a cambiar nuestra respuesta y salir de esa jaula mental de la indefensión aprendida.

La desesperanza o indefensión aprendida, se puede “desaprender”.

En la masterclass de Septiembre del Club Estratégico veremos cómo identificar nuestros “Patrones Problemáticos Personales”, hablaremos de dinámicas psicológicas que nos atascan o nos enredan… como la indefensión aprendida, y otras... para aprender a identificarlas (en nosotros y en otros) y tomar acción.

Te contaré más sobre esto en próximos correos.

De momento te invito a leer en este enlace el cuento del elefante y la estaca, un cuento que se usa mucho para explicar el concepto de indefensión aprendida. ¿Lo conocías?:

» El Elefante y La Estaca

Espero que esta historia te haya resultado interesante y te invite a reflexionar.